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Una alianza con impacto: Vivir como Coach y Las Chicas del Agro

Para que nuestros miembros lleven adelante sus prácticas profesionales, desde Vivir como Coach sellamos una alianza con la Asociación Civil Las Chicas del Agro. De esta forma, los coaches no solo están sumando experiencia, sino que también contribuyen a reducir la brecha de género en la agroindustria acompañando a mujeres que están en el último tramo de su carrera universitaria.

Para ser un coach profesional, hay que dar coaching. Como un piloto que estudia aviación, se deben sumar muchas “horas de vuelo”, todas las que sean posibles, para elevar la calidad de las conversaciones y sumar testimonios que atraigan nuevos clientes. Sin embargo, encontrar los primeros coachees no es nada fácil, y muchos caen en brindar conversaciones gratuitas a sus conocidos.

Como parte de nuestros servicios, los miembros VCC llevan adelante sesiones con clientes reales en condiciones reales. Y, para llevar nuestro propósito más allá, buscamos alianzas con organizaciones que dejan un impacto positivo, porque creemos que desde nuestro lugar podemos contribuir al diseño de un futuro mejor para todos.

Por eso nos aliamos con Las Chicas del Agro, una Asociación Civil sin fines de lucro que lleva adelante iniciativas para inspirar, promover y acompañar el camino de más mujeres en la agroindustria. Junto a ellas, en noviembre iniciamos el programa de acompañamiento “Reconocé y potenciá tus fortalezas”, que cuenta con el apoyo de Fundación Cargill y se extenderá hasta abril del 2024. 

Durante estos meses, nuestros coaches facilitarán conversaciones periódicas, confidenciales e individuales, con mujeres interesadas en desarrollarse laboralmente en el sector agroindustrial, en su mayoría estudiantes que están próximas a finalizar sus estudios terciarios o universitarios.

Con esta iniciativa, los miembros VCC no solo están poniendo en práctica sus habilidades para generar conversaciones valiosas, sino que también están recibiendo retroalimentaciones para elevar progresivamente la calidad de sus servicios, detectando oportunidades de mejora con la mirada de un profesional experto.

La experiencia con nuevos clientes, además de ser una instancia sumamente importante de aprendizaje, permite a nuestros coaches generar un círculo virtuoso de recomendaciones y testimonios que generarán nuevos clientes, de forma cada vez más fluida. Y que estas sesiones tengan un propósito aún más grande, como lo es reducir la brecha de género en este sector productivo, nos permite construir trayectorias profesionales extraordinarias.